Con la quiebra de Aeromar, Ixtepec, Colima, Tepic solo tendrán una aerolínea en funciones, algunas incluso son firmas regionales; inicia huelga en AICM.

Con la quiebra de Aeromar, se quedarán sin una línea aérea comercial tres terminales de Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA), mientras que otras tres solo tendrán una funcionando en ciertos días.

Datos de la paraestatal asienta que sólo quedarán con vuelos de una empresa Colima; Ixtepec, Oaxaca, y Tepic, Nayarit.

Con esto ya suman 10 aeropuertos que opera ASA que, de acuerdo con su página web, simplemente no cuentan con una sola línea comercial operando.

Los aeropuertos vacíos son Palenque, Tuxtla, Tehuacán, Cuernavaca, Toluca, Poza Rica, Tamuín, Guaymas, Nogales y Ciudad Victoria, Tamaulipas.

En el caso de Colima, Aeromar cubría un vuelo diario toda la semana; a Ciudad Victoria e Ixtepec, cinco días a la semana; a Tepic, Nayarit, siete días a la semana y a Puerto Escondido, Oaxaca, tres días a la semana.

Rogelio Rodríguez Garduño, ex director adjunto de Transporte y Control Aeronáutico de la desaparecida Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), dijo que la mayor afectación de conectividad aérea es el caso de Ixtepec, donde sólo Aeromar prestaba el servicio fuera del estado, en tanto que el aeropuerto de San Luis Potosí (que no pertenece a ASA) tendrá un demérito en conexión con las operaciones del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.

Señaló que el mal manejo empresarial de Aeromar lo llevó a acumular un enorme pasivo estimado en 4 mil 218 millones de pesos, pero también hay culpa en la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC) que a través de auditorías periódicas debió garantizar la solvencia financiera de la empresa para sostenerla.

En el caso de Ciudad Victoria, en los últimos 13 años se perdió la operación de tres aerolíneas que quebraron: Mexicana, Interjet y desde el pasado 15 de febrero, Aeromar; con lo que ese aeropuerto quedó huérfano y como una infraestructura inutilizada.

Para Mario Flores Pedraza, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana en Tamualipas (Coparmex), esta situación se reflejará más en una falta de competitividad para los usuarios del estado, pues el resto de aeródromos como los de Nuevo Laredo, Reynosa, Matamoros y Tampico tienen pocos vuelos, por lo que volar desde ahí no será accesible.

El grupo estadunidense Nella Airlines, interesado en comprar a la empresa, informó que ya no realizará ninguna inyección de capital en Aeromar, debido a que no pudo llegar a un acuerdo con el gobierno federal sobre los plazos en los pagos de la deuda.

Preparan demanda


El presidente Andrés Manuel López Obrador acusó que la aerolínea quebrada era una empresa mal administrada, por lo que incluso considera que se presentar una denuncia

Sobre esto, el subsecretario de Transportes, Rogelio Jiménez Pons, dijo que podría interponerse contra los propietarios, pero se deberá presentar ante las autoridades competentes; sin embargo, manifestó que la empresa debe responder por sus deudas.

“Hay muchos adeudos de impuestos, contribuciones de los trabajadores y hay una serie de obligaciones que no se pueden quedar así como una cuestión de que ya se perdió. Hay responsabilidades que en su momento deben ser atendidas”, manifestó.
En la terminal 2 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, los trabajadores de Aeromar se declararon en huelga para exigir lo que se les debe.

La Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA), que representa a una parte de estos empleados, señaló que este movimiento lo hacen para proteger a sus agremiados y buscar la vía para recuperar sus recursos.

La nueva aerolínea Aerus, que tiene planeado iniciar operaciones este año, considerará de forma preferente contratar al personal de Aeromar.


Con información milenio.