Personas que ya han sido vacunadas contra la COVID-19 —algunas incluso con el esquema de dos vacunas completo— han enfermado y muerto en al menos ocho entidades del país, una situación que ha generado alarma mientras la inoculación avanza a lo largo del territorio a seis meses de haber iniciado con la meta de volver a la vieja normalidad.

Tan sólo en la última semana se registraron casos en Michoacán, Nuevo León, San Luis Potosí y Sonora, así como la confirmación por parte de las autoridades sanitarias de Hidalgo del deceso de 36 personas que ya habían sido vacunadas con al menos una dosis.