Las acciones derivaron de un nuevo brote en granjas de los municipios de Rincón de Romos, Asientos y El Llano.

Luego que fue detectado otro brote de gripe aviar, en el que debieron ser sacrificadas 800 aves silvestres, los trabajadores de las granjas ubicadas en Rincón de Romos, Asientos y El Llano, que fue donde se registró el virus H7, son monitoreados para evitar la propagación del virus.

En ese sentido, Rubén Galaviz Tristán, titular del Instituto de Servicios de Salud del Estado de Aguascalientes, reconoció que fue en tres sitios donde se detectó el virus, lo que derivó el monitoreo a 30 personas que se desempeñan en estos sitios.

“Siempre existe la posibilidad de tener algún problema con los humanos, por esa razón en cuanto se despierta una alarma por Senasica nosotros también acudimos, el riesgo es bajo, el salto que se da de aves hacia humanos es muy escaso, pero siempre existe esa posibilidad”, dijo el experto en salud.

Galaviz Tristán mencionó que la problemática ha sido siempre la sanidad animal, sin embargo, debido a que sí es probable que haya un contagio de un ave a un humano, se debe poner atención, es por eso que reiteró la necesidad de realizar pruebas, dado que los trabajadores pueden ser asintomáticos, por lo que se mantienen en constante monitoreo.

Sobre los lugares en los que se detectó la gripe aviar, resaltó la Universidad de El Retoño, ubicada en El Llano, concretamente en el centro de consumo de manejo de aves; finalmente, respecto a la cuarentena que se determinó en semanas recientes, dijo que ésta ya se levantó, luego que se descartaron nuevos casos, se desinfectaron los lugares y se opera con normalidad.

Finalmente, destacó que debido a la acción oportuna no ha habido mayor afectación, y es que a su decir, gracias al sacrificio de las aves se evitó una epidemia, “es una enfermedad migratoria, son las que ocasionan el problema, afortunadamente ya está terminado la época”.

Con información el sol del centro.